Hoy se cumplen 6 meses exactos de la publicación del libro, un día antes de Sant Jordi. 🌹 🐲📚 Aprovecho la efeméride para compartir por qué “El trabajo ya no es lo que era” mediante los 5 gráficos que ilustran el libro.

Los 5 gráficos del libro

1) Hacia un cambio de paradigma

Habrás pasado por la EGB, BUP y COU, o por la Formación Profesional o incluso por la ESO. Da igual. El paradigma que se planteó para tu vida laboral fue, y sigue siendo, el mismo: estudiar y adquirir habilidades “un buen trabajo para toda la vida”. La realidad es que «en tres años un profesional pierde el 40% de su cualificación» como alerta el CEO de Adecco. En una década estamos caducos. Trabajar y aprender deben entremezclarse a lo largo de toda la vida. Esta vida laboral va a durar más años con una jubilación con una curva suave de bajada de actividad en vez de un corte brusco.

2) La fragmentación del trabajo

En España el 90% de los contratos firmados en 2019 fueron de carácter temporal con una duración media de 49 días. También en España, según datos de Eurostat y Staffing Industry Analysts, el 46% de las personas en edad de trabajar NO disponen de un contrato típico. En 2021 solo el 40% de los afiliados aporta cotizaciones estables a la Seguridad Social ¿Aceptamos que para un número creciente de personas la fragmentación de las relaciones laborales es y será una realidad? ¿Buscamos mecanismos de protección adecuados e innovadores para que no sea una forma precaria de trabajar?

El trabajo tradicional no desaparecerá pero seguir pensando a estas alturas en organizar nuestra vida y nuestra sociedad solo alrededor del trabajo tradicional se acerca bastante a la ciencia ficción. 

3) Plataformas para todo tipo de habilidades

El mercado de la 2a mano ha dejado atrás las revistas de papel para organizarse a partir de aplicaciones de móvil que digitalizan todo el proceso, añaden reputación, sistemas de pago ágiles, geolocalización, etc. En definitiva reducen los costes de coordinación y transacción.

En un mercado laboral con relaciones de menor duración las plataformas digitales laborales van a ser las nuevas intermediarias que hacen más eficiente el acceso al talento que las empresas necesitan, cuando lo necesitan, donde lo necesitan. Para todo tipo de sectores para todo tipo de talento. Y, por favor, no podemos seguir “uberizando” todo el fenómeno.

4) No todos los retos del trabajo en plataformas tienen origen en las plataformas

Una mirada analítica, como la que ofrece el informe “Study to gather evidence on the working conditions of platform workers”, permite observar que lo que ocurre en el trabajo mediante plataformas es una acumulación de retos, muchos de ellos no directamente relacionados con el uso o no de una plataforma.

Empezando de fuera para adentro. Los retos del propio hecho de trabajar y del mercado laboral en general. Los retos adicionales por ser trabajadores no estándar. Estos retos son compartidos, por ejemplo, con muchos trabajadores de ETT o los autónomos en general. Finalmente retos propios del hecho de usar plataformas digitales como intermediarias y a veces como agentes controladores del trabajo que se realiza. 

Creo relevante poder segmentar los retos para un debate preciso y constructivo acerca de cómo abordarlos

5) WorkerTech: tecnología e innovación al servicio de las personas trabajadoras

La digitalización ha sido descrita por el filósofo francés Bernard Stiegler como un pharmakon, con una doble naturaleza, indivisible, de veneno y de antídoto. La tecnología digital es la fuente (veneno) de muchos de los retos actuales y, a la vez, es la mejor herramienta que tenemos para hacerles frente (antídoto o vacuna).

WorkerTech es un nuevo concepto que define el uso de las nuevas tecnologías y plataformas de servicios digitales para ofrecer a los trabajadores independientes, una serie de beneficios personalizados, acceso a sistemas de protección y la defensa de sus derechos. Las personas trabajadoras son un ámbito de la innovación social poco conocido hasta el momento.

Justo hace un par de días se publicó un informe del BID-Lab acerca de WorkerTech en América Latina. Muy recomendable.

¿Dónde estamos? ¿Hacia dónde vamos?

Vivimos en tiempos post-normales: «Un interregno donde las antiguas ortodoxias están muriendo y las nuevas no acaban de emerger, nada parece tener sentido», en palabras de Ziauddin Sardar.

Lisa Gansky lo resume con un breve «between the “no more” and the “not yet”» 

¿Hacia dónde vamos? Hacia el futuro. Más específicamente hacia los futuros del trabajo, de los trabajos y de las personas trabajadoras. Siempre debemos hablar de futuros en plural. Si solo existiera un futuro, predeterminado e ineludible, no sería necesario diseñarlo ni debatirlo ¿no?

Existen muchos futuros posibles: algunos más probables que otros, algunos más deseables que otros, pero todos posibles. Los futuros no ocurren por sí solos, se construyen. Los futuros no existen, solo nuestras decisiones existen. Las decisiones que tomamos y las que dejamos de tomar.

Cono de futuros

Seamos osados. Seamos valientes. Diseñemos futuros del trabajo deseables para todos. Ese es el reto colectivo al que nos enfrentamos en esta transición.